14 de abril de 2014

El poder de las creencias

¿Revisas tus creencias?
En las entradas que dedicamos al coaching, su práctica y sus beneficios hemos hablado muchas veces de las creencias, creencias que nos limitan y que nos potencian.

Escribía hace unas semanas sobre el poder de los valores y hoy me voy a centrar en las creencias y todo lo que nos condicionan.

La idea fuertemente arraigada que tenemos de nuestra persona, de las personas de nuestro entorno, de las circunstancias, de cómo deben ser las cosas, todo eso son creencias. Voy a poner algunos ejemplos.

“las cosas hay que hacerlas bien o mejor no hacerlas” (o podría creer que lo importante es intentarlo, o que no hay bien o mal, que los grandes inventos nacieron de grandes “errores”)

“el trabajo no hay que mezclarlo con el placer” (o podría creer que conectar lo que me sienta bien con el hábito puede hacer que trabaje en algo que me apasione enormemente)

“las cosas que se consiguen sin esfuerzo no se valoran” (o podría creer que el esfuerzo es señal de falta de fluidez o valorar la sencillez y lo logrado de manera armoniosa)

“mostrar los sentimientos es de débiles” (o podría creer que mostrar lo que siento es mostrar quien soy en cada momento y que deseo que las personas que me rodean sepan quien soy)

“los hombres no lloran” (o podría creer que las generalizaciones o mandatos solo sirven para no dejar que cada persona sea o actúe según necesite o quiera)

“eres como tu abuelo” (o podría creer que la mirada de la persona que me observa no ve todo lo que soy)

“serás el mejor estudiante de la familia” (o podría creer que la necesidad de ser el mejor no es mía y quizá revisar las expectativas de algunas personas de mi entorno)

Creencias, mandatos, impulsores son esos mensajes que nos decimos o nos dicen, que con el paso del tiempo los creemos como “verdad absoluta” y que nos condicionan en la medida que actuamos como si fueran ciertos.

  • Y si resultara que…no son ciertas?
  • Y si resultara que…creer que son ciertas está limitando la percepción que tengo de mi misma/o y mis posibilidades?
  • Y si resultada que…para agradar a mi entorno me comporto como esperan y no como yo necesito o deseo?


Las creencias, (lo que creo de mi y de la vida) son tan potentes y su condicionamiento tan profundo que revisarlas es un trabajo revelador que se hace en muchos procesos de coaching.

A veces, nuestros bloqueos, nuestros obstáculos son fruto de creencias que tenemos (que quizá tengamos casi de una manera inconsciente) y que no hemos revisado hace mucho tiempo para comprobar si sigue siendo una creencia mía o fue de mi entorno y yo “la compré” sin comprobar si se ajustaba a mi persona.


¿Te gustaría revisar tus creencias? ¿Crees que éstas pueden estar condicionando tu vida actual y tus objetivos futuros? ¿Quieres probar un proceso de coaching?

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