Ya soy mayor para cambiar o no conozco la plasticidad de mi cerebro

La plasticidad de mi cerebro (y del tuyo) es sencillamente increíble. Aunque quizá deberíamos comenzar por el principio

¿Qué es la plasticidad cerebral?

Según Kolb, B., Mohamed, A., & Gibb, R "la plasticidad cerebral se refiere a la capacidad del sistema nervioso para cambiar su estructura y su funcionamiento a lo largo de su vida, como reacción a la diversidad del entorno"

Se ha demostrado que cuando estamos ocupados en nuevos aprendizaje o experiencias el cerebro es capaz de establecer nuevas conexiones entre neuronas, haciendo nuevos recorridos, nuevos caminos, que si los utilizamos habitualmente, se harán más estables y rápidos. Es decir, el cerebro está lleno de posibilidades sin explorar y nosotros podemos hacer mucho para descubrir nuevas rutas.

También se ha demostrado que eso de que las neuronas se mueren y no nacen nuevas es una leyenda urbana. No sólo se crean nuevas neuronas, sino que el cerebro sabe donde debe migrar cada neurona para establecerse en las áreas del cerebro qué más lo necesita y no sólo eso, sino que además el cerebro es capaz de compensar áreas dañadas reorganizando sus redes neurocognitivas.

Y todo esto para qué lo cuento? Para poner la atención que nuestro cuerpo, nuestra mente, nuestro cerebro está en continuo cambio y que nosotros/as podemos incidir en él, podemos provocar nuevos y mejores hábitos, podemos cuidar nuestro entorno, nuestra alimentación, nuestros pensamientos, nuestros actos.

Todo ello influye en nuestro cerebro, en sus neuronas y su plasticidad y viceversa!!! Son caminos circulares que van y vienen en las dos direcciones.

Podemos hacer mucho para mejorar nuestro estado actual y futuro. Podemos hacer por mejorar nuestra actitud, nuestra manera de ver y sentir la vida, nuestra manera de aceptar la realidad, nuestra manera adaptarnos a las nuevas realidades, de flexibilizar nuestras interpretaciones, nuestra facilidad para aprender nuevos conocimientos, para adaptarnos a un mundo cambiante.

El coaching nos ayuda, a través de buenas preguntas, a poner linternas o focos en zonas hasta ahora no vistas, no observadas, no percibidas. El coaching no te muestra nada nuevo, sino algo oculto hasta la fecha.

Te aseguro que nunca es tarde. ¿Pruebas?